Es increíble lo que las nuevas tecnologías de la información y comunicación han cambiado la vida de las personas en unos pocos años. Ese cambio también ha influido en la sexualidad, no sólo en el caso de lo que este artículo nos trae, sino en otros como la búsqueda sexo a través de internet, de recursos audiovisuales a tiempo real, de nuevas formas de seducción y de relación entre los individuos, etc.
Pero el tema que nos trae hoy es el Sexting, un anglicismo no reconocido por la Real Academia de la Lengua Española, pero que su uso cada vez es más extendido. Se utiliza para referirse al intercambio de imágenes de alto contenido erótico a través de los dispositivos móviles. Debido a la rápida extensión de los móviles de última generación y la facilidad de conexión a internet con los mismos, el sexting es practicado por muchos y recibido por muchos más que no tienen gran interés por esta práctica y que siguen siendo ajenos a la misma. Según un estudio realizado en España el sexting pasivo, es decir los meros receptores de las imágenes es de un 4,5 % frente a un 1,5 % de usuarios que practican sexting activo.
La capacidad viral que puede tener un mensaje visual de contenido erótico es de tal magnitud que incluso llega con facilidad a menores de edad en posesión de un dispositivo móvil, que cada vez son más.
Es indudable que la tecnología va a tal velocidad que no somos capaces de calcular la repercusión que podrá tener en un futuro esta práctica, junto a otro tipo de prácticas en la sexualidad humana, en la vida y felicidad en general de las personas. Les dejo con estos videos para que reflexionen.